Estoy muy contenta de poder escribir esta carta. Sé que algunas de las futuras científicas que me estáis leyendo ya sabéis lo que queréis estudiar, pero otras probablemente no lo habéis decidido todavía. Estaba pensando como empezar a contaros lo que hago como científica, y me ha parecido mejor empezar por el principio. La primera vez que dije que quería ser médico tenía 4 años. Yo vivía en un momento en el que era muy raro que una mujer estudiara Medicina. Pero mi abuelo era médico, y yo pasaba en su casa algunos días. En aquella época no se iba al colegio hasta los 5 años, así que por las mañanas cuando no sabían que hacer conmigo me mandaban a la casa de los abuelos. Mis otros primos estaban con mi abuela, pero yo prefería observar al abuelo. Como yo era muy curiosa veía a la gente entrar en el despacho tristes, y salir mejor. Y eso me gustaba. Mi abuelo además escribía artículos, era Doctor (que significa haber hecho una Tesis Doctoral), e investigaba. Ayudaba también a grandes científicos como Santiago Ramón y Cajal, del que era amigo. Un día mi abuelo me encontró escondida debajo de la mesa de su despacho; menos mal que no se enfadó conmigo. Entonces le dije que yo quería ser médico como él. Y lo recuerdo siempre porque fue la única persona que no me dijo que esa no era una carrera para una niña. A él le pareció bien.

Finalmente hice Medicina, y decidí especializarme en Psiquiatría, después de hacer un examen muy difícil que se llama MIR. Mi abuelo era psiquiatra, y yo fui a hacer la especialidad a un hospital que se llama como su amigo: el Ramón y Cajal, que está en Madrid. Ese amigo de mi abuelo recibió un Premio Nobel, que es un premio de mucho prestigio. Así que en ese hospital se investiga mucho, y a mi me encantó investigar. Investigar es ser científica, como vosotras. Es ser curiosa, y tener ganas de aprender. Consiste en hacerte preguntas, y buscar una forma de responderlas. Un médico alemán decía que investigar es “la curiosidad organizada”. Ah, y hay que leer mucho también. Pero lees cosas que te encantan así que es un trabajo divertido.

Yo soy curiosa, como vosotras. Así que cuando trabajo de médico siempre pienso como puedo conseguir que la gente se cure. Tenemos medicinas buenas, pero en algunas enfermedades que yo trato   las medicinas mejoran a las personas, pero algunas no se curan completamente. Así que yo me pregunté ¿Cómo mejorar el tratamiento? Y encontré que hay que tratar a las personas de diferentes maneras a la vez. Por ejemplo, a los chicos y chicas que tienen una enfermedad que se llama psicosis, además de las medicinas es bueno ayudarles a disminuir el uso de drogas. Y también encontré que es muy importante que sigan estudiando.

También me hice preguntas sobre como poder mejorar los diagnósticos. Algunas personas tienen enfermedades que son difíciles de diagnosticar. Eso pasa mucho en una enfermedad que se llama trastorno bipolar. Y encontré algunas soluciones, que ahora se usan en todo el mundo.

Cuando investigas siempre trabajas con un equipo. Yo tengo la suerte de trabajar en Osakidetza, en un hospital en el que soy muy feliz. Tengo unos compañeros muy buenos y alegres, y todos vamos contentos a trabajar.

Espero que vosotras seáis felices también en vuestra carrera de científicas. Y con todo lo que vais a aprender, seguro que cuando tengáis alguna dificultad podréis encontrar la manera de resolverla.

Un abrazo muy grande,

 

Dra. Ana González-Pinto. Médico especialista en psiquiatría. Obtuvo la titulación de doctora con una tesis sobre las sondas neuroendocrinas en la depresión, bajo la dirección de Juan José Lopez Ibor. Vicedecana de la Universidad del País vasco. Jefe Clínico de Psiquiatría de la OSI Araba (Osakidetza), y jefe de Servicio de Investigación, en el Hospital Universitario de Álava. Presenta una consolidada trayectoria científica siendo autora de más de 300 artículos internacionales de alto impacto. Pertenece al grupo de trabajo europeo de trastorno bipolar, en el seno del European College of Neuropsychopharmacology; es vocal del board del  de la International Society of Bipolar Disorders, y es asesora del proyecto europeo del programa H2020 R-Link dirigido por Frank  Bellivier. Forma parte del Consejo Asesor de Salud Mental del Gobierno Vasco. Dirige asimismo el grupo de fragilidad y salud mental del Instituto de Investigación Bioaraba. Es divulgadora científica y de educación para la salud en los social media, administrando el grupo Adiskideak Osakidetzan en Facebook.

 

 


Autoría: González-Pinto A. Editora responsable: Verónica Tíscar.

Artículo con revisión editorial. No existen conflictos de interés en relación al presente artículo. Las opiniones expresadas son responsabilidad exclusiva de los/las autores/as y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de los/las editores/as. Artículo bajo licencia de Creative Commons: Reconocimiento 4.0 Internacional.

Este documento debe citarse como: “González-Pinto A. Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia: Carta a una futura científica [Internet]. Enfermería Activa del Siglo XXI: blog abierto; 11 de febrero de 2021. Disponible en: www.enfermeriaactiva.com”

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